Por: Julie Brill, vicepresidenta corporativa y consejera general jurídica adjunta en Microsoft.
Desde que la Regulación General de Protección de Datos (GDPR, por sus siglas en inglés) de la Unión Europea tomó efecto el 25 de mayo de 2018, más de 5 millones de personas de 200 países han utilizado las nuevas herramientas de privacidad de Microsoft para gestionar sus datos. Y sobre una base absoluta y per capita, el número más grande de personas viene de los Estados Unidos, un país que no es cubierto por GDPR de manera formal, lo que demuestra el deseo de los consumidores norteamericanos por un mayor control sobre sus datos personales.
Hasta hace poco, nuestro entendimiento de la privacidad en los Estados Unidos no había cambiado mucho desde que Louis Brandeis, gran experto legal norteamericano y juez de la Suprema Corte de Justicia, la definió en 1890 como el “derecho a ser dejado en paz”. Por más de un siglo, preservar ese derecho se centraba en protecciones legales diseñadas para asegurar que otras personas no puedan acceder a las ideas y la información que no queremos compartir.
Pero conforme la gente depende más y más en la tecnología para expresar sus ideas, conectar con amigos y familia, manejar sus negocios, y gestionar su salud y sus finanzas, y mientras más y más de nuestras interacciones son capturadas y almacenadas de manera digital, la manera en la que pensamos acerca de la privacidad ha cambiado. En lugar de enfocarnos tan solo en el derecho a ser dejados en paz, la gente quiere interactuar de manera libre y segura a través de la tecnología digital sin perder control sobre cómo sus datos son recolectados y utilizados.
Cada vez más, este deseo de mantener control de la información personal se ve reflejado en leyes modernas de privacidad como un aspecto esencial del derecho a la privacidad. Hemos visto que esto ha comenzado a verse reflejado en decisiones de parte de la Suprema Corte de los Estados Unidos, y en los últimos meses, en legislaciones históricas aprobadas por el estado de California. Es por eso que la GDPR es tan importante, porque establece un fuerte estándar para la privacidad y protección de los datos al capacitar a la gente a decidir qué sucede con sus datos.
En Microsoft, también reconocemos que la privacidad es un derecho humano fundamental. Hemos defendido la legislación nacional de privacidad en los Estados Unidos desde 2005 y hemos sido promotores entusiastas de GDPR desde que fue propuesta por primera vez en 2012. También creemos que los nuevos derechos en el centro de GDPR establecen principios importantes que son igual de relevantes fuera de la Unión Europea. Llamados “Derechos de Datos del Interesado” (Data Subject Rights), incluyen el derecho a saber qué datos son recolectados, corregir esos datos, y eliminarlos o moverlos a otro lugar.
Es por esto que cuando la GDPR de Europa entró en efecto en mayo de 2018, Microsoft anunció que extenderíamos los Derechos de Datos del Interesado, los derechos en el corazón de GDPR que dan a la gente de los Estados Unidos un mayor control de sus datos, a todos nuestros clientes consumidores alrededor del mundo. Esto no era requerido por la GDPR, pero elegimos hacerlo porque creemos de manera firme que ayudar a poner a la gente en control de sus datos es lo correcto. Para conseguir esa meta, construimos un tablero de privacidad donde nuestros clientes pueden gestionar sus ajustes de privacidad, ver los datos que hemos almacenado, y eliminar esos datos si así lo desean. Esto incluye datos que van desde historial de navegación y búsqueda a actividad de ubicación, películas y TV vistas a través de la aplicación de Microsoft o servicio, y datos de salud de Microsoft Health.
En los cuatro meses posteriores, más de 5 millones de personas de más de 200 países se han registrado en el tablero de privacidad de Microsoft para gestionar su información. No es de sorprender que muchos de nuestros clientes en los Estados Unidos, donde GDPR es ahora la ley, se han involucrado de manera activa con nuestro tablero de privacidad. Sin embargo, ha sido sorprendente ver el fuerte interés y nivel de involucramiento alrededor del mundo.
Los primeros 20 países donde los usuarios han accedido a los controles de privacidad de Microsoft para gestionar sus datos personales de mayo a septiembre de 2018.
El nivel más alto de involucramiento vino de los clientes de Estados Unidos donde alrededor de 2 millones de personas utilizaron nuestro tablero de privacidad para gestionar sus datos. También incluidos en los principales 10 países para visitas per capita fueron Japón, con casi 400 mil; Brasil, con cerca de 200 mil; y China y México, cada uno con cerca de 135 mil clientes que se registraron para gestionar sus datos.
La información de nuestro tablero de privacidad nos dice dos cosas importantes y que están relacionadas:
Primero, hay un alto nivel de interés entre los consumidores alrededor del mundo por tener control sobre sus datos personales.
Segundo, los consumidores norteamericanos no son la excepción, pues se involucran de manera activa con las herramientas de control que se les brindan. Este hecho descarta la noción de que los norteamericanos se preocupan menos acerca de su privacidad que los europeos. También confiere una mayor urgencia en la necesidad por una legislación federal que brinde herramientas y protecciones que faciliten a los consumidores norteamericanos el poder ejercer control sobre sus datos personales a través del ecosistema.
Para asegurar que los beneficios de una nueva generación de innovación tecnológica están disponibles para y benefician a todos, las leyes modernas de privacidad que mejor reflejen cómo la gente utiliza hoy la tecnología, son esenciales. Mantenemos nuestro exhorto al gobierno de los Estados Unidos a avanzar con la legislación que proteja el derecho a la privacidad a través de un control más fuerte de la información personal.